En 1856 el astrónomo Charles Piazzi Smyth visitó la isla de Tenerife con la intención de realizar varios experimentos científicos. Su principal objetivo era demostrar que, tal como había predicho Isaac Newton, las imágenes de los telescopios son más nítidas cuanto más alto se sitúe el observatorio, motivo por el que se propuso emplazar los telescopios en la zona del Teide. El resultado de su estancia se plasmó en un libro publicado en 1858 con el título Teneriffe, an astronomer's experiment. Además de por sus investigaciones astronómicas, desde el punto de vista de la fotografía su aportación también fue muy importante, ya que el libro se ilustró con una selección de 20 fotografías estereoscópicas de la isla de Tenerife, 11 de las cuales se tomaron en lo que actualmente abarca el Parque Nacional del Teide.
Hoy en día el Parque Nacional del Teide recibe al año más de 5 millones de visitantes (datos de 2024), por lo que la experiencia de recorrerlo no tiene nada que ver con lo que suponía a mediados del siglo XIX. Por ejemplo, se ha facilitado la subida al pico con un teleférico que permite acceder cómodamente a la zona de La Rambleta (3535 m), pero también se han añadido múltiples restricciones cuyo objetivo es preservar el entorno y evitar una masificación que en muchos momentos resulta evidente. En parte como homenaje y en parte con la idea de plasmar las posibles diferencias, para este trabajo se han fotografiado los mismos lugares del parque nacional donde se tomaron las fotografías que ilustran el libro de Piazzi Smyth.
Cima del Teide a 3715 m de altitud, mostrando parte del cráter
Restos del observatorio de Guajara desde el norte
Restos del observatorio de Guajara desde el oeste
Llano de Ucanca y Roques de García desde Guajara
Panel en los restos del observatorio de Guajara
Bloques de traquita en el Alto de Guajara (2715 m)
Escoria volcánica cerca de Altavista
Bloques de lava en Altavista, a 3260 m de altitud
Vista del Refugio de Altavista desde el oeste
Vista del Refugio de Altavista desde el norte
Entrada a la Cueva del Hielo, a 3350 m de altitud